jueves, 9 de junio de 2011

Monarquías feudal, absoluta y autoritaria.

Monarquía feudal.
- Monarquía feudal : es la monarquía que se desarrolló en el periodo de la Edad Media en la Europa Occidental, caracterizada por las monarquías hereditarias como cúspide de las relaciones de vasallaje propias del feudalismo. Su localización en el tiempo se sitúa entre el siglo XI y el siglo XIII.







- Monarquía autoritaria : es una forma de gobierno que tiene poderes y territorios, y se basa fundamentalmente en un sistema de impuestos, en la diplomacia, un ejército único y un sistema económico central. Es gobernada por un rey, de nobleza alta y hereditaria, gobernaba a vasallos y a campesinos, y los campesinos tenían que pagar impuestos.
El monarca podía estar controlado por los nobles y por el clero, ya que les debía muchos favores económicos y políticos. Sus instituciones más importantes son Las Cortes. Empezó a finales de la Edad Media aproximadamente siglo XV y termina aproximadamente en la segunda mitad del siglo XVI. Se dio principalmente en Europa.
Monarquía autoritaria.

- Monarquía absoluta : es una forma de gobierno en la cual el rey gobierna todos los poderes y es el representante de Dios en la Tierra. El poder es hereditario. El modelo absolutista francés. Las instituciones más importantes son las Secretarías o Ministerios.
Monarquía absoluta.

miércoles, 8 de junio de 2011

Luis XIV de Francia.

Luis XIV de Francia  llamado "El Rey Sol" o "Luis el Grande" nació en Francia el 5 de Septiembre de 1638 y murió también en Francia el 1 de Septiembre de 1715.  Fue rey de Francia y de Navarra desde el 14 de Mayo de 1643 hasta su muerte, con casi 77 años de edad y más de 72 de reinado. También fue copríncipe de Andorra y conde de Barcelona como Luis II. Luis XIV fue el primogénito y sucesor de Luis XIII y de Ana de Austria. Ell poder y la influencia francesa aumentaron en Europa, combatiendo en tres grandes guerras: la Guerra de Holanda, la Guerra de los Nueve Años y la Guerra de Sucesión Española. Bajo su mandato, Francia consiguió el poder político y militar y el dominio cultural. Luis XIV, uno de los más destacados reyes de la historia francesa, consiguió crear un régimen absolutista y centralizado, hasta el punto que su reinado es considerado el prototipo de la monarquía absoluta en Europa.

Louis XIV of France.jpg                                                  

martes, 7 de junio de 2011

El palacio de Versalles.

El Palacio de Versalles es un edificio que fue una residencia real en siglos pasados. El palacio está en Versalles. Su construcción fue ordenada por Luis XIV.
Luis XIV dejó París y decidió construir Versalles como una pequeña ciudad alejada de los problemas. Tuvo varias etapas constructivas: Primera etapa (1661-1668), Segunda etapa (1668-1678),Tercera (1678-1692).
El jardín de Versalles es clasicista, ordenado, racionalizado. Crea una organización que relaciona todas las esculturas y fuentes. Las esculturas se señalan unas a otras. El jardín es muy ordenado, podado y cuidado en la zona próxima al palacio, y después se va asilvestrando.
El conjunto del palacio y parque de Versalles, fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1979.
Luis XIV tenía una monarquía absolutista y para tener a su favor a la sociedad y a los nobles constryó este palacio donde les hacía fiestas, pero el mandaba sobre todo.

                                                                

La guerra de los 30 años y la paz de Westfalia.

Fue una guerra europea que se situó entre los años 1618 y 1648. Fue un conflicto que se produjo por dos causas: la guerra de religión entre católicos y protestantes y la lucha por la hegemonía en Europa.
Se inicia en 1618 en el Sacro Imperio Romano Germánico y acaba en 1648.
Esta guerra ha sido considerada:
 • Como una guerra religiosa, de los católicos contra los protestantes.
 • También estaba en juego quién mandaba en la Iglesia: el papa, el emperador o los príncipes de los distintos países.
 • Estaba implicada la posición social de la burguesía.
Fernando II pretendía hacer del Imperio un Estado católico, y esto era una amenaza para el poder de los príncipes luteranos.
Además, la monarquía europeas querían acabar con la hegemonía de los Habsburgo.
Acabó perdiendo la Casa de Austria y haciéndose más grande la casa Borbón.

Cuando acabó esta guerra se firmó el tratado de la paz de Westfalia o paz de Munster.
  • La religión reformada quedó en perfecta igualdad.

  • Alemania se constituyó y el Imperio quedó en paz con Francia.

  • España reconoció otra vez la independencia de Holanda. 


  • http://www.youtube.com/watch?v=zSh1_cGziJQ                                                   

    lunes, 6 de junio de 2011

    Las Hilanderas.

    Archivo:Las hilanderas con añadidos de mano ajena, by Diego Velázquez.jpgUna de las obras más interesantes y enigmáticas del pintor sevillano, sobre todo en cuanto al tema, es La fábula de Aracne. Fue pintado en 1657. En primer plano vemos cinco mujeres que preparan las lanas para fabricar tapices. Al fondo aparecen otras cinco mujeres ricamente vestidas, sobre un fondo de tapices.   Poner el mensaje en un segundo plano es un juego típico del Barroco. Velázquez quiere dar sensación de movimiento, como se ve en la rueca. También hay que destacar la sensación de que entre las figuras hay distorsión. La pincelada no puede ser más suelta, utilizando manchas como en el caso del gato o el rostro inacabado de la mujer del centro, que está a contraluz. La fábula cuenta que Aracne se proclamó la mejor tejedora del reino, y Atenea la retó a un concurso a ver quien tejía mejor. Ganó Aracne con una tela en la que reprodució los daños que hacían los dioses a los humanos. Al verse rendida, Atenea condenó a Aracne a tejer durante toda su vida convistiéndola en una araña.

    Las meninas.

    Las Meninas es una de las obras más famosa de Velázquez. Fue pintada por el genial artista sevillano en 1656 aproximadamente Sin embargo, Velázquez sale con la Cruz de la Orden de Santiago en su pecho, se cree que fue pintada por el artista cuando recibió la distinción de autor, creyéndose incluso que gue Felipe IV.
    Donde se desarrolla la escena era el Cuarto del Príncipe del Alcázar de Madrid, estancia que tenía una escalera al fondo y siete ventanas, aunque Velázquez sólo pinta cinco de ellas al hacer la sala más corta. El Cuarto del Príncipe estaba decorado básicamente con pinturas mitológicas.
    Están pintadas once personas, todas ellas sabemos quién son, menos una. El personaje principal es la infanta Margarita y a su alrededor las meninas María Agustina Sarmiento e Isabel de Velasco. En la izquierda se encuentra Velázquez con sus pinceles, ante un enorme lienzo que solo podemos ver su parte de atrás. En la derecha están los enanos Mari Bárbola y Nicolasillo Pertusato, el último jugando con un perro. Tras la infanta observamos a dos personajes más de su pequeña corte: doña Marcela Ulloa y el desconocido. Reflejadas en el espejo están Felipe IV y su segunda esposa, Mariana de Austria. Al final está el aposentador José Nieto.
     Velázquez nos muestra una escena de la corte. La infanta Margarita con su corte llega al taller de Velázquez para ver como éste trabaja. Nada más llegar pide agua y María Sarmiento se la da. En ese momento, el rey y la reina entran y algunos personajes los saludan. El señor del fondo tiene la misión de abrir las puertas del palacio a los reyes. La pequeña infanta se percata de la presencia de sus padres y mira de reojo hacia fuera del cuadro. Marcela Ulloa no se ha dado cuenta de qu eestán los reyes y sigue hablando con el aposentador, al igual que el enano, que sigue jugando con el perro.
    Lo que no se ve, es el cuadro que está pintando Velázquez.
    Algunos autores piensan que el pintor está haciendo un retrato del Rey y de su esposa, por eso se reflejan sus caras en el espejo. La escena muestra una fotografía de cómo se vivía en la corte de Felipe IV.
    Las cabezas de los personajes de la izquierda y las manchas de los cuadros forman un círculo, símbolo de perfección. Si unimos las cabezas de los diferentes personajes se forma la estructura de la constelación llamada Corona Borealis.

    La técnica que Velázquez utiliza en esta obra es un potente foco de luz que cae desde la ventana de la derecha. También vemos un claro efecto de claroscuro. La pincelada es muy detallada.

    Archivo:Las Meninas, by Diego Velázquez, from Prado in Google Earth.jpg                                                      

    sábado, 4 de junio de 2011

    La Venus del Espejo.

    La Venus del espejo es un cuadro de Velázquez el pintor más destacado del Siglo de Oro Español. El cuadro se encuentra en la National Gallery de Londres. Anteriormente perteneció a la Casa de Alba y a Godoy, época en la que seguramente se conservaba en el Palacio de Buenavista.
    La obra representa a la diosa Venus, tumbada sobre una cama y mirando a un espejo que sostiene el dios del amor sensual, su hijo Cupido. Se trata de un tema mitológico, pero Velázquez no trata a la figura como a una diosa sino, simplemente, como a una mujer. No se sabe cuándo fue pintado, peros e cree que fue el año 1468, antes de su segundo viaje a Italia.
    Se les muestra con mucha naturalidad, a la venus con belleza, se muestar como son las curvas de la mujer y luego está reflejada en un espejo que sujeta su hijo Cúpido, también representado con mucha naturalidad. La figura de Venus muestra un pequeño escorzo. Aparecen colores resaltantes como el rojo.

    Archivo:VelazquezVenues.jpg                                                                           

    Las Lanzas o la Rendición de Breda.

    La rendición de Breda o Las lanzas es un óleo sobre lienzo, pintado entre 1634 y 1635 por Diego Velázquez y que se conserva en el Museo del Prado de Madrid desde 1819.
    La his´toria dice que en la guerra de Flandes los Países Bajos querían independizarse de Francia y hicieron una tregua, pero cuando el rey Felipe IV subió al trono la tregua desapareció y la guerra comenzó de nuevo. La intención de Felipe IV era recuperar esa plaza tan importante desde la cual se podría maniobrar para otras conquistas.
    El aspecto de batalla se muestra en el fondo, con aspecto de destrucción y con humos irregulares.
    Representa el momento en que los holandeses se rinden a los españoles. Los protagonistas están en el centro de la escena y parecen dialogar como amigos. Nassau aparece con las llaves de Breda en la mano y hace ademán de arrodillarse, pero su enemigo le impide humillarse. Los personajes de la izquierda del cuadro con los holandeses con la mitad de las lanzas y mirando para abajo y los de la derecha son los españoles con las lanzas en alto en señal de victoria. El caballo, que ocupa casi la mitad del cuadro muestra un escorzo.

                                                                                     
    Archivo:De overgave van breda Velazquez.jpg

    jueves, 2 de junio de 2011

    El príncipe Baltasar Carlos a caballo.

    Archivo:Principe baltasar carlos caballo Velazquez lou.jpg.jpgEl retrato de El príncipe Baltasar Carlos a caballo fue pintado por Diego Velázquez en 1635 y se conserva en el Museo del Prado.Velázquez tenía que pintar una serie de retratos ecuestres que se destinarían al Salón de Reinos del palacio del Buen Retiro de Madrid.
    De los cinco retratos ecuestres únicamente éste y el de su padre Felipe IV son obras de Velázquez. El príncipe, de seis años, está en un lugar elevado, lo que produce una evidente deformación en el animal. El príncipe y el caballo fueron pintados antes que el paisaje, de modo que presenta una sensación de profundidad que produce bandas iluminadas y en sombra. El paisaje del fondo es clásico en Velázquez, sobre todo el cielo, que se ha dado en llamar cielo velazqueño. Esta pintura ofrece una mucho brillo, cosa que no había utilizado anteriormente Velázquez.    

    Conde Duque de Olivares.

    El retrato ecuestre del Conde-Duque de Olivares es una pintura del español Diego Velázquez, realizada hacia el año 1638. Se encuentra en el Museo del Prado de Madrid desde 1819.     
    Se desconoce la fecha exacta del encargo, aunque se cree que sería alrededor de 1638 ya que fue cuando se pagó a los guerreros para que evitaran la expansión de los franceses por eso aparece fuego y aspecto de batalla por el y el Conde está representado con aspecto de lucha. Nos presenta sobre un precioso caballo, en una postura totalmente de escorzo y colocado de medio perfil. Velázquez se preocupa por mostrar al espectador la personalidad. Como todo el control lo tenía el válido por eso se le retrata en el caballo, símbolo de privilegio.

    Retrato ecuestre del Conde-Duque de Olivares                                                         

    miércoles, 1 de junio de 2011

    La fragua de Vulcano.

    La fragua de Vulcano es una obra de Diego de Velázquez pintada en Roma en 1630, según informa Antonio Palomino, durante su primer viaje a Italia. Ambos cuadros fueron pintados sin mediación de encargo, por iniciativa del propio pintor quien los conservó en su poder hasta 1634, y después los venidó a la corona, junto con otras obras, para la decoración del nuevo Palacio del Buen Retiro. Actualmente se encuentra en el Museo del Prado donde ingresó el 5 de Agosto de 1819.
    El motivo está tomado de Las metamorfosis de Ovidio, y refleja el momento en que Apolo (dios Sol), revela a Vulcano el adulterio de Venus con Marte, del que él ha sido el primero en tener noticia. El herrero Vulcano, ofendido al recibir la noticia, perdió a la vez pierde el control y abandona el trabajo que está haciendo para ir a tenderla una trampa. Velázquez usa el naturalismo y a Apolo se le ilumina con una luz irreal apropiada para los dioses.


    Diego Velasquez, The Forge of Vulcan.jpg                                                                           

    Los borrachos o el triunfo de Baco.

    El triunfo de Baco es una pintura de Velázquez, está en el Museo del Prado desde 1819. Es conocida como Los borrachos. El cuadro lo pintó algunos años después de su llegada a Madrid, poco antes de su primer viaje a Italia. Utiliza un tema mitológico y como en casi todos los cuadros, usa el claroscuro y la naturalidad.
    El cuadro describe una escena donde aparece el dios Baco que corona a uno de los siete borrachos que lo rodean. Otro personaje semimitológico observa la coronación. Algunos de los personajes que acompañan al dios miran al espectador mientras sonríen. En ella se representa a Baco como el dios que premia o regala a los hombres el vino que libera de forma temporal a los hombres de sus problemas.
    El dios esta metido en la obra como una persona más dentro de la pequeña celebración que se representa pero proporcionándole una piel más clara que a los demás para reconocerlo con mayor facilidad.


    P01170a01nf2006Vela.jpg                                                      

    martes, 31 de mayo de 2011

    Retrato de Felipe IV.

                                                                      
    Este Retrato de Felipe IV, conocido como Felipe IV, en castaño y plata, es un cuadro de Velázquez. Actualmente se encuentra en la National Gallery de Londres. Es un retrato que presenta al rey Felipe IV de cuerpo entero y a tamaño natural. A diferencia de la mayor parte de los retratos de Felipe IV, en que solía vestir de negro, viste un traje bordado en castaño y plata. Es un ropaje de esplendor inusual, lo que parece indicar que está conmemorando algún
    acontecimiento particular. Además, luce el collar colgando de una cadena de oro.
    Este es uno de los muchos retratos que Velázquez hizo del rey Felipe IV de España. Corresponde a una época posterior a su primer viaje a Italia, y en él se ve que el modelado es más suave y se adopta un colorido más propio de la escuela veneciana. Es el principal retrato del rey de la época.
    El retrato se hallaba en la Real Biblioteca de San Lorenzo del Escorial a principios del siglo XIX. Durante la invasión napoleónica fue sustraído y pasó a una colección inglesa. La National Gallery lo compró en 1882.                      
                                                                                                                               

    Vieja friendo huevos.

    Es una obra realizada al óleo sobre lienzo pintada por Velázquez en su primera etapa como pintor en Sevilla, antes del 1622, cuando viaja a Madrid donde posteriormente se instalará. Podemos contemplarla en la Nacional Gallery de Londres. Como todas sus obras de esta etapa, destaca el naturalismo, en el que las figuras aparecen en un primer plano destacando sobre el fondo oscuro,  iluminadas por una luz única, que normalmente entra por la izquierda. Se ilumina la mujer que da título a la obra, el niño que la acompaña, la cazuela de barro en la que fríe los huevos y una serie de enseres y utensilios de cocina que aparecen representados. Del fondo casi no distinguimos algo más que la cesta de la pared y los objetos metálicos que cuelgan detrás. Vemos que se trata de un tema de la vida cotidiana, con modelos que toma de la vida popular. Muchos de sus modelos se repiten, por lo que se supone que pertenecían a su entorno familiar.

                                                              
                                                                               

    Velázquez.

    Diego Rodriguez de Silva y Velázquez. Nació en Sevilla, Andalucía, el 6 de Junio de 1599. Su madre era Sevillana: Jerónima Velázquez, de la que tomó su nombre artístico y su padre un judío convertido al cristianismo y de origen portugués. Tenía cinco hermanos menores que él. Cuentan que la familia pertenecía a la burguesía. Diego con 10 años ya estaba estudiando pintura en un famoso taller de Sevilla. Poco duró porque el siguiente año ingresó en el Taller de Francisco Pacheco cuya fama de buen pintor y hombre de cultura superaba a la del anterior maestro. Mientras él estudiaba pintura, aprendía a leer y escribir, pero la mayoría de la gente era analfabeta. Desde muy pronto apuntaba excelentes trazos de artista, imagínate, con 21 años pintó un cuadro que luego fue muy famoso y que se titula El aguador de Sevilla. Desde luego se sabe que con esta edad ya estaba casado con una hija de su maestro Pacheco, Juana, de la que no se conoce a penas nada.
     Velázquez fue el pintor de la corte cuando reinaba Felipe IV. Gracias al rey consiguió diversos títulos nobiliarios que desataron envidias y venganzas a su muerte.
     Algunos de estos rasgos de su personalidad podemos adivinarlos por su pintura.
    Tuvo diferentes etapas en varios países, España e Italia los más importantes.
    En las siguientes entradas vamos a comentar sus cuadros más importantes.

                                                                                 

    lunes, 30 de mayo de 2011

    El Cristo de Zurbarán.

    Cristo en la Cruz es un cuadro de Francisco de Zurbarán realizado en 1627. En 1626 y ante un notario, firmó un nuevo contrato de que tenía que pintar 21 cuadros en ocho meses. Fue entonces, en 1627, cuando pintó el "Cristo en la Cruz", obra que fue tan admirada por sus contemporáneos que el Consejo Municipal de Sevilla le propuso que se instalara en dicha ciudad en 1629.
    En este cuadro la impresión de relieve es sorprendente: Cristo está clavado en una burda cruz de madera. El lienzo blanco, luminoso (clarocuro), que le ciñe la cintura, de estilo barroco, contrasta dramáticamente con los músculos flexibles y bien formados de su cuerpo. Su cara se inclina sobre el hombro derecho. El sufrimiento, insoportable, da paso a su último deseo: la Resurrección.
                                                                    
    Francisco de Zurbarán 010.jpg

    Felipe IV en la Plaza de Oriente.

     
    Es un monumento a Felipe IV. en la Plaza de Oriente de Madrid de la época barroca. 
    En los jardines de la Plaza de Oriente de Madrid, entre el palacio real y el teatro real, se halla la estatua ecuestre del rey Felipe IV de Augsburgo, realizada en 1640 por el escultor florentino Pietro Tacca. Están el monarca y el caballo en un elevado pedestal rodeado de esculturas, relieves y estanques. Un monumento de los más admirados de Madrid, por belleza y elegancia, que inauguró Isabel II en 1843, y que cuenta con lo que otros no tienen.

    Jardines de Sabatini.

    Los Jardines de Sabatini se encuentran situados frente a la fachada norte del Palacio Real de Madrid, entre la calle de Bailén y la cuesta de San Vicente. Ocupan una extensión de 2,54 hectáreas.
    Estos jardines fueron construidos en los años 30 del siglo XX tras la proclamación de la Segunda República, en el lugar que ocupaban las caballerizas construidas por el arquitecto italiano Francesco Sabatini junto al Palacio Real.
    El Gobierno de la República ordenó que se dieran diferentes bienes al Patrimonio Real, entre ellos éste, cediéndolo al Ayuntamiento de Madrid para poder levantar un parque público. El proyecto fue adjudicado al arquitecto zaragozano Fernando García Mercadal tras resultar ganador en el concurso que se convocó. En 1972 se reformaron los jardines, construyéndose las escaleras monumentales.


                                                                            

    Palacio Real de Madrid.

     Es el mayor palacio de Europa Occidental en cuanto a extensión. Alberga un valioso patrimonio histórico-artístico. También se le puede llamar «Palacio de Oriente». Este nombre se origina por la plaza a la que recae una de las balconadas del palacio, la plaza de Oriente, en la que también se encuentra el Teatro Real. Fue levantado sobre las ruinas del Real Alcázar, destruido por un incendio en 1734, por decisión del rey Felipe V de Borbón. El interior del palacio destaca por su riqueza artística, tanto en lo que se refiere al uso de toda clase de materiales nobles en su construcción como a la decoración de sus salones con obras de arte de todo tipo, como las pinturas de artistas destacados en esa época.
    La fachada principal de Palacio fue construida sobre una base almohadillada, sobre la que se eleva una serie de grandes pilares. También se adornaban estatuas de santos y reyes.  En la fachada meridional fueron dispuestas estatuas como la de Felipe V, y la de Fernando VI. También se encuentra decorado con mitología griega. Cuenta de 2 plazas principales: Plaza de la Armería, Plaza de Oriente; y los Jardines del Campo del Moro y Jardines de Sabatini. También diversos salones con arte representado de muchas formas.
                                                          Archivo:Royal Palace of Madrid 02.jpg

    Plaza Mayor de Salamanca.

    Una de las plazas más bellas y apreciadas por todos es la Plaza Mayor de la ciudad de Salamanca, se construyó en homenaje y agradecimiento por el rey Felipe V por la enorme fidelidad en la Guerra de Sucesión a su hermoso pueblo.
    Está compuesta por enormes galerías, arcadas majestuosas, con un estilo barroco muy apreciable, las espaldañas del reloj se encuentra custodiano por inmensas estatuas de la Agricultura, Industria, de la Música y de la Poesía.
    Una rica y bella historia que marcó a la ciudad de Salamanca como una ciudades más bella y esplendorosa.
    Se ha convertido en el centro de la vida social de la ciudad de Salamanca.
    La plaza mayor de Salamanca es un cuadrilátero irregular y ninguna de sus fachadas mide lo mismo. En total la plaza tiene 88 arcos de medio punto con medallones en los que se representan personajes importantes.